Viva Glam

Anoche estuve con Juanjo en un bar del East Village que se llama The Cock. Laia y Juanjo se pasaron por el cafe a recogerme. Puy tambien se asomo, creo que llevaba puestas varias copichuelas. Aunque se dio a la fuga despues de dar tres voces y media, primero en espanol y luego en ingles, por si a alguien de la clientela no le hubiese quedado claro. Salgo del cafe, y mientras decidimos donde ir, nos refugiamos en un bar que se llama Pieces, en la calle Christopher. El camarero muy simpatico nos avisa que el miercoles es tranquilo, y vistos los intentos fallidos de otros miercoles por descubrir la noche neoyorkina, yo decido darme por vencido y asumir que donde quiera que vayamos va a estar muerto. Laia y Juanjo me intentan convencer de que en NY siempre hay algo, aunque escondido en los lugares mas insospechados... que NY nunca muere. Me cuesta trabajo hacerme a la idea. El caso es que decidimos ir a la busqueda... Un taxi nos lleva a Juanjo y a mi al East Side. Laia se queda en la estacion del PATH de la calle nueve. Llegamos al primer lugar recomendado por el simpatico camarero del Pieces. Un sitio monisimo pero EMPTY de criaturas vivientes. Con una hora que nos quedaba de caceria-divertimento, y con esta aceleradisima cuenta atras hasta las 4am (Hora en que Bloomberg manda a todas a la cama),
nos apresuramos Segunda Avenida abajo a probar suerte (yo sin esperanza alguna) en un tal sitio llamado The Cock, y que yo insisto en llamar The Dick... Preguntamos a dos latinos semi bear semi glam que cual es el Cock, estos nos indican una puerta justo detras de ellos, hacen una especie de ademan tipo "Olala!" y se dejan caer por la Second Ave. La gran sorpresa es que cuando abrimos la puerta del sitio, nos encontramos con algo fascinante. Pequeno, pero a la edida de nuestras exigencias. En cuestion de minutos Juanjo se perdio por entre la gente. No intente buscarlo, estaban todos demasiado apelotonados como para intentar abrirme paso por entre esa multitud de retros, glam, boston boys, etc, etc... Hoy solo me parece merecedero recordar que estando junto a la puerta se nos acerco con cara de sorpresa alguien que a mi me parecia el hermano travesti de Carola. Tal fue nuestra cara de sorpresa que el muchacho se nos acerco, y a mi me dio un pequeno mordisco en la oreja... yo llegue a casa al amanecer, o sea, a las cinco. De todas formas me he levantado a las diez y he comenzado un dia de trabajo. Manana tenemos que salir para Massachussets, y todo parecen complicaciones. Mas complicaciones que anadis a las ya acumuladas. Necesito un respiro. Necesito unos huevos rancheros. O quizas la solucion esta en un bano en leche de burra. Fine. (Busco una foto mona para esto y lo lanzo....)